Solo quería una cosa y es follar con mi tía, quería tener sexo con ella y por eso pensé mucho en si le decía o directamente me insinuaba

Segunda parte del relato «El apartamento´´, aquí tienes el enlace si no pudiste leerlo anteriormente, https://www.todorelatos.com/relato/138459/

¿Le confieso a mi tía que me pone mucho?, ¿me insinúo y la vuelvo a poner cachonda?…. ¿Y si no le digo nada?

Esas fueron las preguntas que revoloteaban sobre mi cabeza. ¿Qué habrá pensado mi tía en estos 3 meses que no nos hemos visto? ¿Querrá repetirlo?

Mi cabeza en septiembre era un auténtico no parar de revivir, recordar y de imaginar cosas en donde mi tía era la protagonista al 100% de mis fantasías. En junio, en el apartamento de mis Tíos ocurrió lo que llevaba desde la pubertad soñando. Follarme a mi tía. Pero….

Me faltaba algo más, fue un encuentro bestial, alucinante y extremadamente morboso pero…. Me seguía faltando algo…. en mi recuerdo estaba presente el «ufff cris ojalá estuvieras despierto y me follaras como una perra´´.

Esa frase que en mitad de estar follando a su sobrino pensando que estaba dormido le salió de lo más adentro de su pervertido ser.

-Ring ¡¡¡¡ , Ring ¡¡ – suena el telf.

Cuando soy capaz de recuperar la cordura veo que la que me llama es mi madre.

-Sí, dime mamá – Contesté

-Hijo, que tal va todo?

Después de unos 5 minutos hablando por telf. Con mí querida madre ….

-Ahh y criss, no olvides que este fin de semana es el cumple de tu primo Daniel y van a hacer un asadero en su casa. Besos tesoro. – Colgó

¡¡ Es verdad ¡¡, mi primo Daniel se nos hacía mayor. Que gran ilusión – Pensé

Él tiene unos 7 añitos, es súper simpático y gracioso y además es el más pequeño de todos los primos, por lo que casi todos le hacemos el mimo cada vez que lo vemos. Extrañamente tiene a un parecido a mí de pequeño asombroso.

De repente, un sudor frío recorrió cada centímetro de mi espalda, no me había percatado, en el cumpleaños iba a estar mi Tía Carmen. Sería la primera vez que la vería después de nuestro fin de semana en el apartamento de Playa del Inglés.

Estaba petrificado, anonadado, paralizado, sólo imaginaba la situación de volver a decirle «Hola tía´´ y me congelaba, a la par de que notaba que mis mejillas se ponía muy coloradas, es un aspecto muy típico en mí, cuando algo me sorprende me sonrojo con facilidad.

Había llegado el día, me iba a reencontrar con la familia, amigos de mis primos y con mi querida tía.

Al llegar ya se notaba el ambiente fiestero, ellos viven en una finca a las afuera de Telde. La casa es grande, de un color salmón pastel con piedra de cantería de Arucas de color gris oscuro. Tienen terraza, bastante enorme por cierto, con una piscina de esas que se compran en grandes superficies de construcción junto con un pequeño asador.

Una casa acogedora, simple, en medio de la nada y sin nadie que pueda molestarte.

Tocamos el timbre -Ding Dong….

En seguida abrieron, salió mi tío juan. !!Que alegría!! Hacia muchísimos meses que no lo veía por temas de trabajo.

-Tioooooo -exclamé

-‎Eyyyy la bendición sobrino – frase típica de mi tío; pasen pasen fíjense vaya revuelo tenemos aquí.

Se veía toda la terraza lleno de niños y niñas correteando por medio de la terraza, a la derecha del punto de vista que teníamos estaba la barbacoa donde ya se empezaba a oler bien rico el olor a braza con la carne pidiendo ser devorada, mientras que, a la izquierda estaba lleno de sillas ocupadas por un montón de invitados, entre ellos mi abuela, abuelo, mi primo (el cumpleañero), el otro primo, las madres de los otros niños, etc.

Una vez saludado a todos y tomado haciendo mientras me servía una copa levanté la vista y vi a mi tía, estaba bajando las escaleras que conectaban su casa a la terraza.

Pufff madre mía como iba, llevaba un vestido negro ajustado, dejando entre ver la mitad de sus muslos, a la altura de la espalda lo llevaba como deshilachado-cortado que dejaba entre ver tremenda espalda y para rematar llevaba unos tacones negros que se sujetaban con cinta, de tal manera que formaban unos rombos hasta la mitad baja de su tibia y peroné.

No sé si he conseguido describir con claridad cómo iba vestida pero les puedo asegurar que iba sexy de cojones, sobre todo por los tacones esos.

Todo el mundo arrancó un pequeño aplauso, no sé si era por la forma de vestir o porque empezaba a bajar la comida. Yo aplaudía por….. bueno ya saben.

El almuerzo estaba saliendo de maravilla, la familia reunida, las madres y padres de los amigos de mi primo y los bichos chicos en la terraza o metidos en el agua.

En varias ocasiones nos dijeron que si queríamos nos metiésemos en el agua, pero debido a que había gente que no conocíamos, al menos a mí me daba vergüenza ponerme en bañador allí.

Eran las 9 de la noche, ya casi todos se habían marchado. Menos los que se iban a quedar en casa esa noche.

Si, se me había olvidado mencionarlo, la fiesta aparte de barbacoa con piscina iba a ser también una fiesta de pijama entre los amigos de mi primo. Yo no iba a ser menos y también acepté quedarme, aunque sabía que iba a ser un poco caótico, lleno de algunos niños y sus padres en sacos de dormir todos apretujados en el salón y algunas habitaciones de la casa.

Pero bueno sería una experiencia la mar de inesperada, al menos lo que llegó a ocurrir.

Los niños empezaron a ducharse cada uno a su ritmo, con alguna ayuda de sus madres (que alguna estaba…..pufff) hasta que me tocó mi turno.

Empecé a ducharme tranquilamente, jabonándome, relajando la mente después de tantos gritos en la terraza. Me dieron las 9:30 aproximadamente cuando me percato no quedaban toallas.

-Maldita sea!!! Y mi toalla?. – exclamé furioso.

No me quedaba otra, me acerqué a la puerta y SALI EN PELOTAS PARA QUE TODAS ME VIERAN!!!!

No queridos lectores, eso fue fruto de mi imaginación o pequeño lapsus que tuve antes de abrir. Retomamos.

Me acerque a la puerta, abrí disimuladamente y asomé la cabeza a ver si había alguien. Nadie. Normal, estaban todos comiendo.

Al minuto veo que pasa alguien.

-Oye!!! Oye!!!

-Si? – contestó un amigo de mi primo que pasaba por allí.

-Oye puedes llamar a Daniel por favor, dile que su primo lo necesita en el baño.

El niño asintió y se marchó en su busca.

A los pocos segundos, se oyen unos pasos subiendo la escalera a toda prisa, era él.

-Crissss!!!! Crissss!!! Tienes que bajar tío estamos comiendo y jugando a la play al FIFA. Estamos perdiendo y nos tienes que ayu…….

-Ehhhh para para – le interrumpí

-Atento Dani, no tengo toalla y la necesito para secarme porfa pregúntale a tu tía si me deja una -le dije en voz tranquila y pausada

-‎Vale cris!!! Ya voy -contestó

Tardó unos 2 minutos en volver a subir, yo ya me subía por las paredes, no sabía si se lo había dicho o si por un casual se fue a jugar al FIFA de nuevo.

Tocaron en la puerta. Di un salto tan grande que sin apenas esfuerzo me puse en pie.

-Cris!!!! (Gggrrgg)….. soy yo (ggrrrr) Daniel (cambio y corto grrrrggr).

-Dígame soldado Daniel (ggrrgrgr) -le seguí el rollo.

-La señorita maléfica dice que ahora mismo te la sube (gggrrrgg cambio y corto)

-Buen trabajo soldado -concluí.

Me puse nervioso, me costaba tragar y empezó ese sudor frío recorriéndome toda la espalda….

La maléfica era mi tía, así le llamaba mi primo Dani a mi tía Carmen.

De pronto, ese miedo inicial fue tornándose en sonrojo, calor, escalofrió y la mente me iba a mil. Mi tía iba a traerme una toalla, estando yo totalmente desnudo, el pensarlo simplemente creo en mí una erección y de esa erección no pude empezar a tocarme ligeramente.

Tenía que idear un plan, tenía que volver a poner cachonda a mi tía y por fin poder fallármela como dios manda.

Pensé en una cosa…..

Toc toc…. sonó la puerta

-Si?

-Soy yo Carmen, ¿Te dejo la toalla fuera si? -dijo

-No tía por favor pasa que no hay en la salida de la ducha y me puedo resbalar.

…… se hizo el silencio unos 10 segundos eternos.

¿Que habrá pasado por esa cabeza en esos 10 seg? fue lo que pensé mientras sonó el crujido de la puerta abriéndose.

Vi la silueta de mi tía entrar, la mampara no me dejaba ver en detalle nada más que la sombra de su vestido negro.

Caminaba con paso firme y decidida a poner la toalla al lado de la mampara, cuando en ese mismo instante le dije.

-Es que si no me voy a……..

Y de un empujón abrí la puerta de la mampara exponiendo plenamente ante los ojos de tal bella mujer, con el agua cayendo sobre mi cuerpo y con la erección en mi miembro viril ya en un estado de éxtasis total.

-resbalar -terminé la frase.

-Cris!!!! Que haces!!!! Soy tu tía….!!! -exclamó

-lo siento tía no pensaba que fuera a sentarte tan mal – dije avergonzado

Cuando se dirigía a cerrar la puerta, volvió a entrar y de una manera descarada, me miro la polla y me dijo, pues eso no lo vuelvas a hacer más.

Y de una manera brusca cerró la puerta.

Quería que el mundo me comiera allí mismo, ¿Que había hecho?, ¿Me volverá a dirigir la palabra?….. ¿Que pasara?

Esas fueron las preguntas que me salieron nada más cerrar la puerta mi tía…. aunque el desenlace fue todo bastante inesperado.

Las siguientes horas restantes las recuerdo muy ligeramente, mi mente estaba metida en el tremendo follón que había pasado antes. A eso de las 11 me fui a la cama, en la habitación de invitados, lejos de todos esos niños y padres en sacos de dormir, gritando y revolucionados.

La habitación era de color violeta pastel, con muebles gris oscuro, con algún papel con orquídeas decorando la habitación y una cama de matrimonio para mí solo.

A pesar de tanta tranquilidad, tanta comodidad y tanto silencio mi sueño era imposible de conciliar, parecía un búho en su jornada nocturna.

Miraba el reloj de vez en cuando, 12:12 – 12:59 – 01:35…..

Ya no sabía qué hora era, cuando de repente, veo que la puerta se abre lentamente, me deja ciego por un instante hasta que se vuelve a cerrar. Ya sabéis quien era no……

-Criss estas despierto? -comenzó

-Sí tía, no he podido conciliar el sueño -contesté

-Normal, ni yo tampoco cris, sabes que lo que se hizo antes está mal no?

…….

-Si tía. -avergonzado respondí

-¿Como se te pasó por la cabeza?, están tus primos, sus amigos e incluso tu tío.

-Lo siento

-¿Respóndeme, que te impulsó a hacerlo?

Estaba tan en mi mundo que se lo conté, le conté lo que había vivido en ese apartamento de playa del inglés en verano.

-Tía, te tengo que confesar una cosa, pero te suplico que me dejes terminar.

-asintió con la cabeza.

-En el apartamento de playa del inglés…… bueno….. las pastillas que me tomé no eran reales, no me dejaron dormido, te veía debajo de mi brazo como me mirabas la polla y me empezó una erección muy fuerte tía, quería pararla, pero te veía que la seguías mirando, que incluso te mordías los labios, luego te empezaste a tocar, gemir y oía como estabas tan húmeda que eso ya fue un desenfreno en mi erección que no pude parar. Luego, me bajaste los bañadores y me decías que la tenía muy grande y rica, tanto que me la empezaste a mamar súper rico, como si de una prostituta se tratara. Me llevaste a la gloria con esa lengua bajando sobre mi pilar del pene, haciendo círculos sobre mi glande y metiéndotela hasta lo máximo que podías. Luego, te la metiste en tu jodido chocho, tía, no me lo podía creer, te la tenía dentro…. aguantaba por seguir en mi papel de dormido porque me tenías muy muy cachondo en ese momento, notaba como revotaba tu culo en mis muslos, oía como tus fluidos endulzaban mi polla y sentía recorrer tus jugos por mis muslos hasta que te corriste como una perra y me hiciste correr a mi como un auténtico animal.

– Criss, En serio estabas despierto? -dijo después de permanecer callada escuchando.

-Si

-Y y….que….pensabas hacer? -dijo en voz temblorosa.

-Pues tía, quería volver a ponerme muy perra, quería ver si en el baño serias capaz de

-Uffffff cris!! Para !!!! -Interrumpió

-Es que te vi esta tarde con ese vestido negro y esos tacones de mujer madura que

-Que pares por favor!!! -suplicó.

-Qué te pasa tía?

-Nada

Me di cuenta, una vez pude enfocar a su cara en medio de la oscuridad, que estaba algo tímida, titubeante aunque con un camisón semitransparente de color negro con bordados a la altura del cuello, dejando intuir una ropa interior bastante sexy de cuyo color no pude distinguir por la oscuridad, descalza y enseñando la mitad de su lindo muslo.

-Es que tía, un chico joven como yo lo único que quiere es follar con una mujer madura que este buena y darle un par de polvos fuerte -empecé con el juego

-Calla!!!

-Por? -contesté

-Nada -respondió

Sin pensármelo dos veces, fruto a como la estaba viendo, me quité los calzoncillos de un movimiento y continué con un……

-Quieres ser mi gatita esta noche?

Mi tía solo miraba mi polla, en ese momento flácida aun mientras mordiéndose el labio por la parte derecha largó un….

-Uffff……Si

Se acercó a la cama, al sentarse dejo entrever su tanga de color violeta, cruzó las piernas al borde de la cama exhibiendo todo su muslo hasta la mitad de su nalga perfecta. Su mano recorrió rápidamente hasta la zona perversa de su sobrino. Al rozar su mano entre mis genitales volví a sentir esos escalofríos que había sentido meses atrás.

Mi tía no dudó, y comenzó a mover mi piel de arriba a abajo, del gusto que me estaba dando me estaba empezando a empalmar. Decidió pasar a la acción y sin previo aviso, aún no del todo erecta se la metió es la boca entera.

Personalmente, cuando me hacen eso casi siento más placer que cuando está totalmente en su salsa, así que el placer que sentí en ese momento fue bestial. Su saliva, su calor, su lengua y su forma de chuparla invadió por completo mi cuerpo y mi mente.

En menos de un minuto, se me había puesto como un ciprés.

-Uffff cuanto te he echado de menos -confesó cachonda.

-Si tía? Tanto la necesitabas? -respondí en medio de mi éxtasis oral.

-Sí, de hecho cuando follaba con tu tío pensaba que lo hacía con ella dentro.

En ese momento, después de ese comentario, me encendí muchísimo y tuve que pedirle que se acostara.

Ella accedió de inmediato, como si de una sumisa se tratara.

La verdad es que acostada era aún más bella, se había recostado en plan sensual y le fue bajando sutil y lentamente su camisón negro de encaje, llevándolo al límite del pezón tapado por el camisón y el pezón al descubierto.

-Por qué paras? -preguntó

-Shhhh hoy quien manda soy yo -pícaramente contesté

Inmediatamente, no pudo contener su primer gemido acompañado de un cierre de ojos rebosante de placer a cada palabra que oía.

-Hoy quieres que sea tu zorrita? -preguntó

-Compruébalo por ti misma – pícaramente le baje el camisón hasta que el pezón erizado y duro asomó y le metí un lametón certero que retumbó cada uno de sus diminutas células sensitivas.

-Ains!!! Que rico….. criss.

Empecé a lamerlo de arriba a abajo, rozando mi lengua con su pezón, cada lametada era una oleada de placer por parte de mi tía. Dulcemente los arropaba en mi lengua, los lamia en círculos y de repente 3-4 lametones de arriba a abajo con más presión y rapidez.

Mi tía ardía, se agarraba su otro pecho con la mano mientras gemía dulcemente sexy.

Cuando menos se lo esperaba la agarre de las muñecas muy fuerte, se las coloque por encima de la cabeza como si de una esposas se tratara. Luego, con calma, me dirigí hacia su otro pecho, este mucho más duro que el otro fruto de su estimulación previa.

-Crisss me pone mucho que me aten en la cama!!

-Pues estas atada por las manos de tu sobrino y volviéndolo loco con tus curvas -respondí

La solté, en busca de lo prohibido, empecé a bajar muy lentamente por todo su cuerpo. Iba besando en dirección lineal descendente toda su caja torácica, abdomen hasta llegar a su monte de venus.

Me medio incorporé y empecé a masajear ligeramente sus piernas, centrándome en la zona de sus aductores, de manera progresiva iba ganando terreno hacia el deseo más puro de mi tía. Ella no paraba de soplar mientras se agarraba ambas tetas con sus manos.

Ya mis manos rozaban su musculatura pélvica, metí el dedo por dentro de su lindo tanga y aparte para verle todo su chocho a mi tía. Al hacerlo se veía un líquido blanquecino entre su entrada y su tanga fruto de que estaba muy perra, eso hizo que me encendiera más si cabe y mientras una mano agarraba su lindo tanga con la otra me empezaba a masturbar, ya no aguantaba más sin hacerlo.

Su chocho era muy atractivo tenía un clítoris grande, redondo y visible por la excitación del momento, con unos labios mayores asomando ligeramente y una entrada en su vagina que pedía a gritos una buena polla.

Me acerque animalmente y le metí un lametón de arriba a abajo.

-Fuaaahhh…… -el placer hizo que se incorporara de un taponazo

-Shhhhh tranquila, si ahora empieza lo divertido -pícaramente contesté.

Se volvió a recostar, y nada más hacerlo continué con mi función de encender más si cabe a mi tía. Me centraba en su clítoris de una manera suave, sin apenas presión realizando movimientos circulares, de arriba a abajo e incluso ligeros chupones. Cuando menos se lo esperaba, de arriba a abajo le metía un gran lametón, como si de un helado se tratara, que la estremecía de placer. A todo esto se acompañaba de pequeñas micro penetradas con mi lengua en su vagina lisa, apretada y húmeda.

Esto hizo que se corriera por primera vez cuando jugaba con su clítoris de una manera un poco más intensa, y claro, no iba a parar, así que continúe hasta que sus piernas temblaban del enorme placer.

Cuando recuperó la compostura le dije que si podía metérsela, que no aguantaba más, a lo que asintió de inmediato.

En la postura del misionero me dispuse a penetrar a mi tía, cogí mi polla y antes de metérsela empecé a frotarla con todo su chocho chorreante, tocando sus labios mayores, su entrada y su clítoris.

-Entra ya cabrón -me suplicó

Me dirigí a la entrada y sin apenas esfuerzo le metí la punta.

-Uffff que rico Tía -le dije

-Métela hasta el fondo, quiero sentirte -me respondió.

Como si de un soldado se tratase acaté las ordenes de mi querida teniente e introduje mi polla hasta lo más adentro de su ser.

-Ainsssss !!!! -gimió mientras me arañaba la espalda.

De manera lenta y precisa la empecé a penetrar, estábamos fusionados el uno al otro, mucho más que lo vivido anteriormente en el apartamento. Nos abrazábamos, nos mordíamos el cuello, ella encima arañaba cuando aumentaba el ritmo y me agarraba o me cacheteaba el culo cuando quería.

El ritmo de las penetrabas iba en aumento, al igual que los gemidos por ambas partes, estaba tan húmedo que apenas sentía fricción, me pedía cada vez que la penetrara mas rápido, hasta el punto de que la reventara y eso hice.

-Uffff así cari, dame fuerte sobrino, revienta a tu tía!!!! Sigue así, sigue, sigue ….uffff sigue…… sácala sácala SACALAAA!!!!

Y de repente sucedió una cosa que no estaba dentro de lo previsto, me pedía que la sacara, sin entenderlo muy bien lo hice y cuando la saque no salí de mi asombro.

Mi tía empezó a convulsionar, se tocaba el clítoris y estaba corriéndose literalmente, estaba soltando líquido, había estimulado tanto sus glándulas de skene que estaba teniendo lo que se conoce como un SQUIRT !!!!. Era la primera vez que me había pasado con una mujer y fue una sensación emocionante, excitante y satisfactoria.

Cuando recuperé la compostura, y ella también, me dijo que ahora era mi turno, la verdad es que habían retenido mis ganas de correrme bastante.

Me dice -ahora vengo

Trajo un condón, me lo colocó y se puso a cuatro, TREMENDO CULO DIOS.

Yo fui decidido a metérsela por la vagina y correrme dentro pero me paró en seco.

-PARA, PARA !!! No voy a poder, tengo los labios hinchados te tanta penetraciones. Métemela por el culo, a tu tío le gusta -dijo

De nuevo, boquiabierto me quedé, también iba a ser la primera vez que se lo iba a meter por el culo a una mujer.

-Como digas tía -respondí

Estaba totalmente nervioso pero totalmente cachondo, siempre me había puesto muchísimo hacerlo por ahí y la curiosidad hizo que no perdiera ni un segundo no sea que se arrepintiera.

-Ve despacio, no como antes !!! -me dijo

-Si tía – contesté

Y así lo hice, fui despacio, coloque mi glande erecto en las puertas de su ano y empujé, era mi primera vez y la verdad me pensaba que era igual que en la vagina y para nada, tuve que hacer mucha más fuerza para poder dilatarlo…. una vez dentro, estaba en la mayor de las glorias que he sentido en mi vida, estaba muchísimo más apretado que ninguna otra vagina y el placer era enorme tan enorme que simplemente con 2 minutos después de penetrarla por el culo me corrí.

-Uffff tía que rico, que rico, ahora mismo me voy a correr.

-Córrete, sobrino, córrete dentro de tu tía!!!! Me has dado una noche bestial, además de mi primer SQUIRT!!!! -contestó.

Al decirme eso no pude aguantar más y me corrí dentro soltando un gemido de éxtasis total, cayendo rendido en el cuerpo de mi Tía.

Cumpliendo mi fantasía, haciendo tener el primer SQUIRT de mi tía y teniendo mi primera experiencia anal!

Sencillamente fascinante la experiencia con la tía Carmen.

Fin