Mi Primita Me Vuelve Loco «Después de grabar a mi primita durante varios días, era increíble la cantidad de pajas que me había hecho»

Si no habéis leído la primera parte de este relato, os aconsejo que la leáis ya que va muy relacionada. A todos los que me habéis escrito muchas gracias por vuestros comentarios pero dejad de pedirme las fotos y los videos porque no los tendréis nunca.

Después de grabar a mi primita durante varios días, era increíble la cantidad de pajas que me había hecho mirándola como se cambiaba, pero algo que me intrigaba mucho es que no conocía aún que hubiera salido con ningún chico y tampoco vi que se masturbara, a no ser que lo hiciera por la noche con la luz apagada, cosa que me daba pena no poder verla. Todas esas dudas tuvieron respuesta cuando invitó una noche a una amiga de su nuevo trabajo que vivía fuera de la ciudad y al llegar tarde de una cena preferían que se quedara a dormir. Se llamaba Maria y era un poco más mayor que mi prima, tenía 23 añitos. Era bastante alta sobre 1,80 muy delgadita, pechos medianos pero un culo de aquellos que al verla con pantalones tejanos ajustados te daban ganas de apretar las nalgas con las dos manos. Yo la conocía de alguna vez que había venido a comer y la verdad también me gustaba mucho pero nunca imaginé que tendría la oportunidad de verla desnudándose por mi ordenador.

Esa noche estuve despierto durante horas mirando unas pelis en mi ordenador esperando que llegaran. Llegaron las dos como a las 4 de la mañana y muy borrachas por el ruido que hicieron al entrar en la casa. Inmediatamente activé todas las cámaras de la habitación para saber que ocurría en cada momento. Mi polla estaba ya bien dura solo de pensar que pronto vería a las dos chicas desnudándose y metiéndose en la cama juntitas. Desde el principio ya me pareció que estaban muy contentas ya que no paraban de reírse y dar tumbos por la habitación. La primera en empezar a quitarse la ropa fue mi primita quedándose en un conjunto de sujetador y tanga de color blanco con el que ya había estado jugando yo algún día. Le quedaba estupendo, los pezones se le marcaban perfectamente y se veían ya algo excitados, y el tanga se le metía entre sus dos nalgas perdiéndose de viste el hilo de atrás. Me pareció que Maria le decía algo a mi prima y ella empezó a enseñarle el culo, supongo que diciéndole que no le gustaba porque lo tenía demasiado grande, alguna vez ya me lo había dicho a mi. Maria negaba con la cabeza y empezó a quitarse a ropa ense&ntilde agachándose y tirándose en la cama, las dos empezaron a revolotear en la cama haciéndose cosquillas la una a la otra hasta que María se puso encima de ella agarrando sus manos con las rodillas, entonces sucedió lo que nunca hubiese imaginado, ni siquiera en mis mejores fantasías, le empezó a morrearle la boca, al principio mi prima parecía que no reaccionaba a sus besos pero poco a poco al sentir como María le agarraba las tetas y estimulaba sus pezones haciendo que se pusieran como piedras mi primita empezaba a abrir la boca en señal de que le estaba gustando lo que le hacia su amiga Maria. En ese momento María le soltó las manos y se levantó un poco sacándose el sujetador y mostrando sus tetas al aire. Agarró las manos de mi prima y las acercó a sus tetas. Mi primita empezó a masajéaselas mientras María pasó su lengua por su cuello bajando hasta sus pezones. Los estimulaba dando pequeños círculos y succionando casi apretando sus dientes estirándoselos como si le estuviera sacando su lechecita.

Así estuvieron unos minutos hasta que María decidió seguir bajando hasta el coñito de su presa, le abrió las piernas mientras la miraba directamente a los ojos. En ese momento pude apreciar una cara de lujuria en mi prima que nunca había visto, sus ojitos brillaban y sus labios se abrían dando paso a una lengua juguetona. María abrió los labios sonrosados de mi primita tocando con la yema de sus dedos el clítoris rojizo que asomaba bien durito y mojadito luego sacó su lengüita y le pegó un lametón de abajo a arriba que hizo que el cuerpo de mi prima se arqueara hacia atrás, luego se dedicó a pasar su lengua por el clítoris dando pequeños círculos cada vez más rápidos y en pocos segundos mi prima le cogió de la cabeza y se la hundió en su coño teniendo un orgasmo brutal. La visión de María de rodillas enseñando su culo mientras le comía el coño a mi prima que a su vez estallaba en un orgasmo hizo que me volviera a correr esta vez sin poder controlar donde echaba mi semen que manchó parte de la pantalla del ordenador dejando un charquito en la mesa. Estaba tan excitado que aún no se como no entré en esa habitación a follármelas a las dos. Cuando mi primita ya se había tranquilizado María aún seguía su jugueteo con la lengua en el coñito, pero ahora se podía ver como introducía uno de sus dedos en el interior de su sexo.

Después del primero introdujo el segundo mientras mi prima se pellizcaba salvajemente los pezones provocando una excitación más placentera, casi podía oír sus gemidos desde mi habitación y eso me dio la idea de poner a grabar todo lo que se oía desde la puerta, así tendría el sonido en la grabación. Cuanto más rápido metía sus dedos más abría las piernas, si María seguía dándole ese tratamiento dentro de su coño no tardaría en tener otro orgasmo, pero de repente los sacó y se los puso cerca de la boquita de mi prima, que entendiendo sus intenciones los chupó como si se tratase del caramelo más dulce. Por la forma de hacerlo estaba claro que no era la primera vez que le metían algo en la boca para chupar. Ahora María se quitó el tanguita que aún llevaba puesto y pude ver un coñito totalmente depilado que chorreaba por todas partes. Se levantó y se sentó en su cara poniéndoselo prácticamente en la boca. Mi prima le cogió de las nalgas y empezó a chapárselo, con la excitación que ya llevaba María no tardó en correrse…

Continuará