Me llamo Pedro y vivo en un pueblo de Avila.Hace diez años que me case con Alejandra que es una mujer muy atractiva de 38 años. Alejandra es rubia de mediana estatura, aunque es delgada, es muy caderona y de culo muy bien formado quizá un poco exagerado para mí gusto.
Últimamente nuestra vida sexual se ha vuelto muy monótona y por eso he empezado a añadir diferentes fantasías basadas en juegos de rol para poder recuperar el estimulo que hemos perdido con el tiempo.
Alejandra al principio de conocernos era muy fogosa y le gustaba hacer de todo, pero dos años después de casarnos y a raíz de nacer nuestro hijo Adrian empezó a rehuir el sexo, de forma que empezamos a reducir los días de sexo y el tiempo por coito y por su puesto nada de culo ni de boca por lo que cansado de esta situación he pasado a la acción y he decidido emputecerla.
Como decía antes he empezado con los juegos de rol y me he dado cuenta de que tiene muy marcadas sus tendencias sexuales, quizá siempre he sido un marido ejemplar y muy respetuoso con sus gustos y sus límites en cuanto a nuestras relaciones sexuales, sin embargo desde que he tomado las riendas las cosas han cambiado.
Lo que más excita a mi mujer es que me salte los límites y que la somete a mis deseos y me pide que la trate como a una puta.
A veces quedamos en Pubs o discotecas como si fuéramos desconocidos y me la follo en el servicio a cambio de dinero, nos excita que nos vean entrar o escuchar como los tíos golpean la puerta para intentar entrar, al salir nos miran y murmuran entre dientes comentarios soeces sobre la pinta de zorra que tiene ella, y también silban o se frotan el rabo en señal de disposición para fallársela.
Pero la última vez me sorprendió mucho la iniciativa de mi mujer, que quiso quedar conmigo en un hotel haciéndose pasar por prostituta al encuentro con su cliente.
Me desplace a un hotel en el centro de Madrid y la estuve esperando hasta que el tío de la recepción llamo por el teléfono fijo y me dijo-Don Pedro hay una señorita que pregunta por usted…..si si indíquela mi habitación….gracias. Enseguida sonó mi puerta, toc toc, pasa…pasa. Al entrar venia riéndose y me dijo que el de recepción le había pedido precio por una mamada y que ella para hacerlo real le había dicho que cobraba 20€.- ¿Cómo?…¡¡¡20€ solo cacho puta!!! Le arranque el abrigo y pude ver que se había tomado muy en serio lo de hacer de puta…ligueros, tanga de hilo, medias con costura de brillantes y sostén de media copa con los pezones al aire además de ir pintada como una zorra. La cogí por el pelo con rabia y la lleve hasta el ventanal, la puse de rodillas en un taburete y me la jodi por el culo sin miramientos mientras la insultaba y la decía que era una puta de carretera, luego la saque del culo y trate de metérsela en la boca, pero ella se resistía diciendo que le daba asco después del culo,le pegue un sonoro bofetón y abrió la boca en plan marrana, se la metí hasta los huevos y le escupí en la cara, la saque de la boca y sujetándola por el pelo la obligue a chuparme el culo,al rato la volví a sodomizar, pero esta vez la saque al pasillo para correr el riesgo de ser sorprendidos, termine con una abundante corrida en su cara y justo cuando estaba terminando se abrió la puerta de la habitación de al lado y apareció un gordo con una toalla en la cintura, el tío sin darnos tiempo a recomponernos me pidió disculpas por la intromisión pero me comento que estaba pendiente de recibir a una “señorita “y al escuchar ruidos creyó que se podría tratar de ella. Yo con mi mujer recién incorporada del suelo y escondiendo la cara llena de leche le dije que ella estaba libre pues yo había terminado, el tío se acerco con toda su cara le pego un repaso a la zorra en el culo y me pregunto qué cuanto me había cobrado, le dije que 100€ cuarenta minutos, y el tío se acerco al oído de Alejandra y le indico que se pasara por su habitación antes de marcharse pues era su día de suerte.
Ese día mi mujer por puta tuvo que soportar al gordo encima, que se la follo hasta por el culo con una enorme polla de goma según me conto, ya que al parecer el cerdo era medio impotente y no conseguía tenerla tiesa para la penetración y lo único que le mantenía excitado eran los juguetes dilatando los orificios de la puta de mi mujer. Al final consiguió correrse mientras ella le comía los huevos y él se pajeaba simultáneamente hasta que se corrió en su pelo.
Mientras yo escuchando los gruñidos del gordo a través del tabique, no pude por menos que meneármela imaginando la cara de asco de mi mujer con semejante espécimen.
Al rato mi mujer llamo a la puerta y al abrir era un espectáculo, el pelo enmarañado, los pezones al rojos, los labios mordisqueados, el tanga roto, marcas de manotazos en las nalgas, al verla me lance hacia el pasillo para enganchar al gordo pero ella me retuvo y me dijo que todo había sido de mutuo acuerdo y saco 200€ y me dijo al oído…. ¿has visto la zorra que tienes en casa?
