La fantasía de mi esposa es que compartamos amantes

A la mañana siguiente cuando desperté, en mi boca aun tenia el sabor amargo del semen de Samuel, subí a la recamara y cuando me disponía a entrar, cristina salio del baño, venia completamente desnuda, se detuvo frente a mi y me dijo,

– vaya cesar, anoche fue tu noche,

Sus palabras me apenaron un poco, así que solo agache la cabeza, y le pregunte,

– ¿ya se fue Samuel?

– ya cesar, pero no te sientas mal, tómalo como una experiencia mas, ven, vamos a la recamara,

Di media vuelta y entramos a la recamara y nos sentamos en la orilla de la cama y ella comenzó a decirme

– déjame adivinar, aun sientes el sabor del semen cierto

– si,

– jajajajaja..A mi me sucede lo mismo, Samuel tiene un sabor especial, a mi me dura días el sabor de su semen en mi boca,

– si lo creo,

– pero recuerdas que ayer te dije que serias mi nena,

– si cristina, lo recuerdo

– bueno, entonces quiero que tu me cumplas a mi una fantasía,

Sus palabras me pusieron algo nervioso, pero no me podía negar,

– y ¿cual es esa fantasía cristina?

– en un momento lo sabrás,

Cristina tomo una almohada y se hinco entre mis piernas, después sujeto mi verga y comenzó a frotarla lentamente, sus manos las tenia tan tibias, que a los pocos segundos tuve una erección,

– bien cesar, ahora relájate y déjame terminar,

cristina comenzó a mover lentamente su mano de arriba hacia abajo, mientras que con la otra sobaba ligeramente mis genitales, la sensación era bastante placentera, hacia varias semanas que no tenia intimidad con ella y mucho menos con otras personas, así que en segundos mi verga se puso aun mas dura,

– te esta gustando cesar,

– bastante cristina,

– que te gusto mas, ¿chuparsela a Samuel o lo que te estoy haciendo ahorita?

 La verdad era que deseaba ambas cosas, chuparsela a Samuel era una cosa y estar con cristina otra, así que le dije que ambas,

– jajá jajá…vaya, si no eres nada tonto, sabes, si tu quisieras ambos podríamos disfrutar mucho,

– tu crees cristina,

– claro, pero ahora déjame terminar

Cristina continúo sacudiendo mi miembro y la sensación que provocaban sus dedos en mis genitales era bastante placentera,

– vaya cesar, parece que la tienes muy atrasada, espero que salga una buena cantidad de semen,

En ese momento estaba disfrutando tanto, que no le respondí, y deje que continuara, sus movimientos se iban haciendo cada vez mas y mas rápidos, sin duda mi esposa había cambiado bastante desde que deje que se acostara con otros hombres y ahora parecía toda una experta,

– mhhh..Si Cristina…asi continúa

Cristina acerco sus labios a mi glande y comenzó a succionarlo ligeramente, eso provocó que mis piernas se tensaran un poco,

– no te vayas a venir aun cesar

Poso su lengua en la base de mi miembro y lentamente comenzó a subirla hasta que llego a mi glande, lo succionó un par de veces y después llevo su lengua de nuevo hacia abajo, aquello era demasiado para mi, lo que había pasado con Samuel me había dejado bastante excitado y ahora esto, estaba a punto de reventar,

– tranquilo cesar, aguanta un poco mas

Mi respiración ya era bastante agitada y mis piernas estaban completamente tensas, y me fue imposible aguantar más y de un segundo a otro termine de forma abundante sobre la mano de cristina,

– cuanto semen cesar, de verdad ya te hacia falta,

Levante in poco mi cabeza y me di cuenta que cristina estaba juntando el semen en la palma de su mano y de pronto, hizo algo que no esperaba, salto sobre mi pecho y me dijo

– a ver cesar, abre la boca

Me quede algo consternado ante su peticion, quería que me tragara mi propio semen,

– perooo…no cristina

 – vamos cesar, si en verdad te gusta tanto el semen que diferencia hay del tuyo al de Samuel…jajá jajá,

Cristina lentamente fue acercando su mano a mi rostro y de un instante a otro, la estampo sobre mi boca, intente moverme pero fue inútil, mi propio semen había entrado directamente en mi boca, sentí como resbalaba por mi lengua, intente jalar aire, pero lo único que logre fue tragármelo,,

– jajá jajá…que pasa cesar, ¿ya no te gusto?

intente levantarme, pero cristina con su otra mano me sujeto por el cabello y metió sus dedos en mi boca, sentía que me ahogaba, el semen caía directamente en mi garganta y no tuve de otra mas que comenzar a tragármelo,

– no cristina, ya es suficiente,

Ella comenzó a reír y se quito de encima, rápidamente me levante y me fui al baño y comencé a lavarme, tenia mi propio semen embarrado en mis mejillas y mis labios y la verdad es que el sabor no era tan fuerte como el de cesar, trague mas agua y termine de lavarme la cara y cuando Sali, cristina estaba acostada,

– te gusto o prefieres el de Samuel

 No le conteste y me fui a la cocina con la idea de beber algo para quitarme el sabor, cristina había logrado su fantasía y ahora no tenia idea de que seguía,

 continuara…..