El amigo de mi padre quiere usar mi cuerpo

Luis es amigo de mi papa hace tiempo, me cuidaba desde pequeña y a mi me caía muy bien, con el paso de los años frecuentaba mucho la casa como siempre y conforme crecía me di cuenta de que algunas miradas me daba pero nada fuera de lo común.

No fue hasta un día que volví de la escuela y mi madre llamo que si quería podía salir con unas amigas porque Luis estaba arreglando algo de la lavadora en la casa y mi padre tampoco estaba, hubiera dicho que si pero lo cierto es que no tenia ganas, mi plan era solo encerrarme en el cuarto, a veces me masturbaba, siempre cerraba la puerta pero una sola vez me olvide de hacerlo y fue cuando Luis entro de pronto, solo me estaba tocando por encima de la ropa así que no pudo ver nada pero desde entonces la situación se volvió rara e incomoda, el solo se quedo callado un rato y luego solo me dijo que estaba por irse.

-Que haces pequeña?

-No…nada, no le digas a mis padres.

-Ya estas en edad para tocarte?

Todo pasa muy rápido.

Estoy gimiendo cuando siento un dedo entrar y luego otro, empieza a mover sus dedos y luego de pronto agrega otro dedo, estoy gimiendo mas ahora, siento que puedo llorar por el placer y eso parece poner contento a Luis, introduce otro dedo y ahora los mueve con mas fuerza y mas profundo, mis piernas tiemblan y siento que voy a correrme en ese instante.

-No quiero que te vengas amor.

El dice en tono alto pero empuja con rudeza y me jala uno de mis pezones, no soporte y simplemente sentí mi cuerpo temblar.

-Que te dije puta.

Saca los dedos y antes de que pueda decir algo me da un golpe en la mejilla, mis ojos lagrimean porque no lo esperaba y luego el se para quitándose la ropa, me toma y termino sentada en su erección, su pene es grande y yo no tenia experiencia, me abre las piernas y puedo sentirlo, estoy llorando un poquito.

-Quieres mucho esto, verdad? Luces tan patetica como una perra.

Con una mano me sostiene de mis nalgas y con la otra busca tocarme de nuevo.

-N…no, no.

Estoy muy sensible todavía.

-No te atrevas a venirte de nuevo o te daré otra bofetada,si?

Asiento sumisa y me pide que me ponga de rodillas, lo hago gimoteando mientras busco apoyarme en mis codos, el no espera y me toma de la cintura acercándome a su verga frotando contra mi entrada.

-No..Luis, por favor.

No se exactamente que estoy pidiendo, tengo miedo pero no quiero que pare, comienza a introducirse lento, esta abriéndome, es grande y es doloroso, pero se siente muy bien, no pasa mucho tiempo para que se mueva en un entrar y salir sujetándome bien para que no me mueva de mi lugar, estoy gimiendo y rogando de nuevo.

-Mira como te comportas como una puta insaciable.

Aquello hace que me moje mas, niego con la cabeza y sigo gimiendo esta vez pidiendo mas, mucho mas.

-Mmm se siente muy bien.

-Así es puta, te encantara ser follada por cientos de hombres.

Grito en afirmación y el vuelve a su tarea de follarme, me da incluso golpes en mis nalgas y me vuelvo a venir, siento como si mis jugos resbalaran y el se ríe de mi, me toca toda, me dice lo puta necesitada que soy y luego sale, como estoy de espaldas solo puedo sentir algo caliente caer en mis nalgas.

-Lo haces bien puta, ya iras mejorando.

Y claro que lo hice con el tiempo.

______

De lo poco que recuerdo de ese dia. Perdi mi contraseña pero les dejo un relato pequeño ya que la encontre.

Ojala lo disfruten un poco. Besos