Aprovechando que mis padres no están, viole a mi hermana

Antes que nada quiero dejar claro que este es un relato ficticio y en en ningún momento hago apología a la violación. Si os gusta dejad vuestros comentarios. Gracias.

Aquel fin de semana mis padres se fueron a las Islas Canarias. Mi hermana y yo nos quedamos solos. Nos decribiré un poco. Yo soy mayor que ella 2 años. Mido 1.80 y tengo un cuerpo normal, ni gordo ni delgado, y mi polla no es la mas grande del mundo pero tiene buen tamaño. Mi hermana es bajita, morena, con el pelo largo que le llega hasta la cintura, buenas tetas y buen culo heredado de mi madre.

Como os comentaba nos quedamos aquel finde solos, ya que tenia la casa sola pensé en salir de fiesta y traerme alguna chica para follar. Así que me preparé. Me duché me puse mi mejor ropa, y avise a unos amigos para salir a una discoteca nueva que estaba de moda por Madrid. Tras terminar de ducharme mi hermana entró, yo me vesti, me perfume pero me dieron ganas de mear y tenia que entrar al baño. Llamé a la puerta del baño y pregunté a Celia, mi hermana, si podía entrar a mear que llegaba tarde, ella me dejó pasar, yo me saqué la polla y empecé a mear. La cortina de la bañera era traslúcida y pude ver el cuerpo de mi hermana, note como se enjabonaba todo su cuerpo, sus pechos, bajando por su tripa, su entrepierna, instintivamente mi polla empezó a crecer y la meada se cortó. Sin darme cuenta mi mano empezó a subir y a bajar por mi polla, mi hermana al no escuchar el chorro preguntó que que hacia, yo reaccioné y le dije que pensaba en mis cosas, me guardé la polla me subí la bragueta y me despedí de Celia. Mientras salía de casa me sentía mal, era mi hermana pero no la veía como tal, empezaba a verla como una mujer con un cuerpo perfecto y eso me excitaba.

Pase una muy buena noche de fiesta, pero no conseguí llevarme a ninguna chica a mi casa. Así que esa noche tocaba un vladimir, paja y a dormir. Entré a casa intentando no hacer ruido para no despertar a mi hermana, al entrar noté que la tele del salón estaba encendida, y en un canal para adultos. Fui al salón y no había nadie, por lo que apagué el tv. Fui a la cocina a coger algo de agua, me serví agua helada en un vaso y fui subiendo por las escaleras que daban al segundo piso, arriba caminando hacia mi cuarto vi la puerta de la habitación de mi hermana abierta, y me asomé para comprobar que estaba. Estaba oscuro y no veía nada, saqué el movil y con la linterna apunte hacia el interior de la habitación, mi hermana estaba en su cama totalmente desnuda, había un consolador en el suelo, y en las sabanas justo donde estaba su coño habían un liquido blanco. Mi hermana se había estado masturbando. Ver a mi hermana así me puso a 100. Me acerque poco a poco a su cama, y con mi mano muy suavemente empecé a tocar sus tetas, fui bajando hasta llegar a su coño el cual estaba peludo, su vello púbico estaba totalmente mojada y mi polla estaba a punto de reventar mi pantalón. Ya no pensaba que fuera mi hermana, era una mujer a la que quería follarme. Fui al garaje a por unas cuerdas, y un trapo, volví a la habitación de mi hermana y muy despacio le ate las manos a sus espalda y con el trapo la amordacé.

Volví a tocarle el coño, esta vez metí mis dedos, mi hermana empezaba a gemir, y empecé a comerle el coño, ella gemía cada vez mas y empezó a moverse, cuando miré a su cara vi que se había despertado. Me quite la ropa, me puse en medio de sus piernas y le metí mi polla hasta el fondo, ella soltó un grito ahogado, y yo empecé afollarla con fuerza. Tras 10 minutos penetrando a mi hermana me corrí dentro de ella, fue muy placentero pero eso no había acabado aun. La susurré «te voy a quitar la mordaza, si gritas te la vuelvo a poner y vuelvo a follarte pero esta vez por el culo» ella asintió con la cabeza. Le quite el trapo de la boca y ella preguntaba que por que hacia eso, yo no contestaba. La levanté y la lleve hacia el baño, la metí en la bañera y la obligué a arrodillarse. Ella obedecía, y yo le metí mi polla por la boca, al principio lentamente pero después de unos segundos empecé a follar su boca con fuerza y sin compasión. De sus ojos empezaban a salir lágrimas, le daban arcadas, estaba ahogando a mi hermana con mi polla. Tras unos minutos salieron chorros de semen que llenaron tosa su boca, alguno pudo escupirlos pero la mayor parte entró directamente a su garganta. Se la saqué y empecé a mear en su boca, ella no apartaba la boca. Cuando termine de mear mi hermana puso desató sus manos ella sola, se levantó, cogió mi polla ya flácida y me dijo «hermanito la próxima vez atame mejor, me he desatado cuando me comias el coño, ah y si no quieres que vaya a la policía y cuente todo esto, apartir de mañana harás todo lo que te diga, ahora eres mi putita» y se fue riendo a su habitación.